Esta vez, les compartimos indicadores de un informe estadístico de la Organización Mundial de la Salud, OMS, fechado en abril del año 2023, que se concentra en los problemas de salud que más afectan a los adolescentes del mundo, causados por diversos factores:
4.500, entre los 10 y 24 años, mueren cada día; los de menor riesgo se ubican entre los 10 y 14 años. Las lesiones, la violencia interpersonal, las autolesiones y las afecciones maternas son las principales causas.
En 2019, 115.000 adolescentes, de 10 a 19 años, murieron como consecuencia de accidentes de tráfico.
En 2019, se ahogaron más de 30.000 adolescentes, más de las tres cuartas partes de ellos varones.
La violencia interpersonal se encuentra entre las principales causas de muerte entre adolescentes y jóvenes a nivel mundial. Causa casi un tercio de todas fueron de varones en los países de ingresos bajos y medianos.
Más de una cuarta parte de las personas entre 15 y 19 años son bebedores actuales, lo que equivale a 155 millones de adolescentes.
El cannabis (marihuana) es la droga psicoactiva más consumida entre los jóvenes: alrededor del 4,7% de las personas de entre 15 y 16 años la consumieron al menos una vez en 2018.
En 2018, al menos, uno de cada 10 adolescentes de entre 13 y 15 años consume tabaco, aunque hay zonas donde esta cifra es mucho mayor.
La depresión y la ansiedad se encuentran entre las principales causas de enfermedad y discapacidad entre los adolescentes, y el suicidio se encuentra entre las principales causas de muerte entre personas de 15 a 19 años.
La mitad de todos los trastornos de salud mental en la edad adulta comienzan a los 14 años, pero la mayoría de los casos no se detectan ni se tratan. La violencia, la pobreza, el estigma, la exclusión y vivir en entornos humanitarios y frágiles pueden aumentar el riesgo de desarrollar problemas de salud mental.
En 2021, 1,7 millones de adolescentes, de 10 a 19 años, vivían con el VIH, alrededor del 90% en África.
Los niños y adolescentes menores de 15 años representan, aproximadamente, el 11% de todas las personas con tuberculosis a nivel mundial.
Se estima que la diarrea y las infecciones del tracto respiratorio inferior (neumonía) se encuentran entre las cinco principales causas de muerte entre adolescentes de 10 a 14 años, siendo las tasas de mortalidad particularmente altas en los países africanos de ingresos bajos y medianos.
La adolescencia temprana, 9 a 14 años, es el momento óptimo para la vacunación contra la infección por VPH y se estima que si el 90% de las niñas en todo el mundo recibieran la vacuna contra el VPH, se podrían salvar más de 40 millones de vidas durante el próximo siglo. Sin embargo, se estima que en 2021 solo el 12% de las niñas a nivel mundial recibieron la vacuna.
Aproximadamente, 12 millones de niñas de entre 15 y 19 años y al menos 777.000 menores de 15 años dan a luz cada año en las regiones en desarrollo. Las complicaciones del embarazo y el parto se encuentran entre las principales causas de muerte de niñas de 15 a 19 años en todo el mundo.
Los jóvenes corren un mayor riesgo de sufrir peligros ambientales y contaminación debido a su fisiología de desarrollo y sistemas inmaduros.
En el 2016, uno de cada 6 adolescentes, de entre 10 y 19 años, tenía sobrepeso.
Muchos niños de los países en desarrollo llegan a la adolescencia desnutridos, lo que los hace más vulnerables a las enfermedades y a la muerte prematura.
La anemia por deficiencia de hierro fue la segunda causa principal de años de vida saludable perdidos debido a discapacidad entre adolescentes de 10 a 19 años en 2019.
En el 2016, uno de cada 5 adolescentes cumplía las directrices de la OMS sobre actividad física. La prevalencia de la inactividad es alta y mayor entre las adolescentes que entre los varones.
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