¿La infidelidad es por falta de sexo o falta de atención? Fue el interrogante que, en su cuenta de Twitter, planteó Diana Durán (@Duran12D), en cuyo perfil destaca que es ingeniera, multifacética, lectora, amor propio y ama a una “cosa peluda de cuatro patas”.
De allí hacia abajo acumuló, hasta el 28 de junio, 6.1 mensajes, 13.4 mil retuits, y 32.3 mil me gusta. Al azar, #sinrecato escogió varias respuestas: “Por falta de…madurez, educación, curiosidad, principios, respeto y amor propio, carencia de algo…”, y un larguísimo etcétera.
Otras, como la de Mary Carmen López, fueron más descriptivas: “La femenina, la mayoría de las veces, es por falta de atención. La masculina es hasta por vicio”; y estructuradas como la de Pedro Bastida, psicólogo: “Como todo fenómeno humano, la infidelidad es multicausal. Está muy sujeta a historia personal, familiar, sociocultura de cada una de las personas y, como si fuese poco, a lo que sucede dentro de la relación misma. No es aconsejable reducirla a una o pocas causas”.
Lo planteado por la ingeniera Durán bien podría conectarse con los resultados de una reciente encuesta online del portal Gleeden, “la plataforma de encuentros extraconyugales que se encuentra disponible en Colombia”, que señala que un significativo porcentaje de mujeres en el país, reconoció que la falta de cumplidos por parte de su pareja es el principal motivo para que muchas decidan buscar cariño fuera de casa.
La encrucijada de los infieles
Resultados de estudio
“Los resultados del estudio son incuestionables: el 77% de mujeres entre los 28 y 35 años que son o han sido infieles en Colombia, admite que la falta de cumplidos o palabras bonitas las empujó a la infidelidad. De hecho, el 84% de las mujeres encuestadas en el país, afirma que sus respectivos cónyuges no les dedican palabras cariñosas o piropos, lo que ha generado tensión y frustración en la pareja, convirtiéndose en el detonante para buscar una relación extraconyugal”, explica Gleeden.
La cuestión, de acuerdo con el portal, tiene como soporte un estudio publicado, recientemente, en el Journal of Sex & Marital Therapy, revista especializada en sexología en Estados Unidos. “Las mujeres que reciben elogios de su pareja regularmente – especialmente sobre su físico – están más satisfechas sexualmente que las que no los reciben. De acuerdo con los resultados del estudio, si la mujer se siente más valorada y deseada físicamente por su pareja, mayor será su nivel de emoción, lubricación y orgasmos”.
Otros indicadores de la encuesta, aplicada entre el 1 al 8 de junio de 2020, a las 11.605 usuarias de Gleeden, establecen que “el 82% de mujeres explica sus deseos de infidelidad en la necesidad de sentirse deseada y valorada. El 76% empezó a ser infiel para reconectarse con su feminidad y demostrarse a sí misma que es capaz de seducir a otros ante la falta de atención de su pareja. Un 42% de mujeres declara que el deseo sexual hacia su pareja se ha visto afectado como consecuencia de la falta de halagos”.
Silvia Rúbies, directora de comunicación de la firma en Latinoamérica y España, sostiene que los resultados son, perfectamente, coherentes con los testimonios de las mujeres que todos los días los envían a la plataforma. “La mayoría de ellas admite que, en general, recibe pocas atenciones y menos elogios de sus cónyuges”, concluye.
Punto de vista
Sobre la temática sinrecato.com conversó con la psicóloga y magister en Psicología Clínica de la Universidad del Norte de Barranquilla, Andrea Trujillo Brugés, quien explica que una cosa es una persona infiel por algún motivo y otra que sea deshonesta con su pareja.
“No por el hecho de la falta de cariño, vas seguir siendo deshonesto con tu pareja. Hay personas que sí toman la decisión de desunirse, pero obviamente depende de todo el contexto como tal. Hay que ver la formación de la persona y cuáles son sus valores, directamente relacionados con la relación”, señala la profesional.
Sobre si hay incidencia de la autoestima en la persona, la psicóloga aclara que es como algo muy particular de cada quien. “Si tú estas en una relación como, vulgarmente, se dice tóxica, no tiene nada que ver con tu pareja sino contigo mismo y como es tu perfección propia. Obviamente, tú te vas a aguantar muchas cosas, siempre y cuando creas que no merece continuar”.
Trujillo dice que en la relación de pareja es clave la comunicación, pero esa que viene desde la formación en los primeros años de edad, la que permite expresar lo que se siente, lo que se quiere, y lo que no se quiere. No saber manejar eso es lo que muchas veces impide tener relaciones genuinas.
“El miedo a no manifestar qué es lo que queremos realmente, porque a veces andamos con una persona y desistimos de muchas cosas que nos gustan por agradarle a esa persona, sin que sea genuinamente lo que nosotros queremos”.
‘Hay que ver la formación de la persona y cuáles son sus valores‘.
“Por ejemplo, yo quiero tener una familia, y es a la fuerza porque esa es la única persona que anda conmigo en el momento, pero si él no quiere tener una familia, pues a mí no me importa y yo voy pa’ lante porque eso es lo que yo quiero. Y, finalmente, lo culpo a él porque yo era la que quería tener una familia y no él, pero realmente no se lo comuniqué nunca”, agrega Trujillo.
Otro de los factores que deben hacer parte de la vida en pareja de manera fundamental, de acuerdo con la psicóloga, son la tolerancia y la comprensión porque “permiten que la otra persona puede pensar y sentir diferente a mí y no tiene que pensar y vivir igual que como yo”.
Destaca que erróneamente ocurre que se quiere permanecer ahí, “intentando que la otra persona piense y actúe como yo. Eso es lo que primero debo entender yo, que debo comprender y tolerar que hay otras personas que piensan totalmente diferente a mí. Si yo quiero estar con esa persona, pues debo comprender y aceptarla tal como es; y si no es así, pues me hago a un lado. Es fundamental saber que no siempre yo voy a tener la razón y que tengo que esperar lo mismo que yo estoy dando, porque somos seres totalmente diferentes”.
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