En abril del 2023, en nuestro portal sinrecato.com publicamos el artículo ‘Alquiler de vientre’… ¿Gesto humanitario o negocio?, relacionado con una tendencia que ha tentado a figuras como el astro del fútbol mundial, el portugués Cristiano Ronaldo: La “maternidad subrogada”.
Antes de seguir destaco lo del afamado futbolista, con base en información de la prensa mundial la cual asegura que tiene tres hijos, los gemelos Eva y Mateo y a Alana, todos conseguidos a través de vientres alquilados… ¿Cuánto costaron? Se los dejo como tarea…
Bien. Resulta que sobre el complejo tema se pronunció el máximo jerarca de la Iglesia Católica, el papa Francisco, el pasado lunes, 8 de enero, festivo en Colombia, durante un encuentro con los embajadores delegados ante el Vaticano, en Roma; fue directo en rechazar ese método de concepción de la vida y pidió a los países que esto deben prohibirlo.
Dentro de las frases que argumentó se destacan: “Un hijo es siempre un don y nunca el objeto de un contrato”, “la práctica de la llamada maternidad subrogada ofende, gravemente, la dignidad de la mujer y del niño”, “es la explotación de la situación de necesidad material de la madre”.
También se refirió el prelado a lo que considera una vulneración de derechos humanos, contrario a lo que respaldan lo que él denomina ‘colonizaciones culturales’: “Hay nuevos derechos, no del todo compatibles respecto a los definidos originalmente y no siempre aceptables”, “la teoría de género extremadamente peligrosa porque borra las diferencias en su pretensión de igualar a todos”.
Igualmente, el Papa reiteró su rechazo a la manipulación genética, patentes biológicas humanas, clonación, entre otras porque, desde su punto de vista, atentan contra la dignidad humana.
Quiero confesarles que cuando leí lo del papa Francisco pensé que se armaría toda una polémica, pero me equivoqué; solo vino a corroborarme que hemos perdido la capacidad de asombro, por decir no la cordura, y poco nos importa lo que pase para lograr objetivos, incluyendo vanidades.
Retomando lo del artículo que publicamos en nuestro portal en abril del 2023, con respeto a la “maternidad subrogada”, aunque para mi suena a eufemismo descrestador, para evitar decir ‘alquiler de vientre’, el tema en Colombia estaba haciendo tránsito en el Congreso de la República buscando un amparo legal y así entrar a la liga de países que sí dan el permiso, Estados Unidos, México, Ucrania e Israel, entre otros, pero como que la cosa no ha ‘cuajado’.
Se hizo alusión al intento de regulación por parte del representante a la Cámara por el Valle del Cauca, por el Polo Alternativo Democrático, Jorge Alejandro Ocampo Giraldo, quien lo expuso a consideración de la Comisión Primera Constitucional Permanente; y otra de los ministerios de Justicia y de Salud. No obstante, como que esto no pasó puesto que no veo publicaciones al respecto, ni en pro ni en contra.
El periódico El Colombiano, aprovechando lo que dijo el papa Francisco recogió conceptos, como el de la psicóloga, magíster en Bioética y docente de la Pontificia Universidad Javeriana, Angelica Bernal, quien asegura que caso de darse la regulación en Colombia, “deberá, entre otras cosas, proteger los derechos del menor, determinar quién se quedaría con el bebé si se da un embarazo múltiple, qué hacer si este viene con malformaciones o si la mujer preñada desarrolla un problema médico o psicológico “perforación de útero, preeclampsia, depresión posparto, etc.)”.
De igual forma es citada la Asociación Colombiana de Centros de Reproducción Humana que manifiesta lineamientos técnicos, administrativos y jurídicos que, aunque no reglamentan, describen lo que hacen actualmente y los límites que tienen.
“Entre lo consignado está, por ejemplo, que la práctica sea ordenada por un grupo médico y para causas muy específicas; que la mujer solicitante no tenga útero o padezca una enfermedad grave que le impida gestar”, señala.
Y se concluye en que “con la normativa, la idea es apuntar a un ideal: Que haya espacio de consenso entre las mujeres, los abogados y las parejas, sin que se vuelva un negocio”, según concepto de Jorge García, director científico de la Clínica de Fertilidad Humana Dejando Huella Fertilidad.
En todo caso desde esta tribuna seguimos pendientes del debate sobre si es un negocio de abultada cifra, o un gesto humanitario para aquellas parejas que, verdaderamente, tengan dificultades para procrear de manera normal.
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