Una tendencia que viene abriéndose paso de manera acelerada, en la vida de parejas, no comulga con la tenencia de hijos y ese es el tema que nos comparte nuestro invitado mensual el psicólogo y sexólogo, José Manuel González (*):
“Los modelos de relación de pareja han evolucionado de manera significativa en las últimas décadas y una de las tendencias emergentes, recientemente, es el fenómeno de las parejas llamadas SINKS, una sigla que significa Single Income, no Kids (un solo ingreso, sin hijos).
Este tipo de pareja está compuesto, generalmente, por personas con altos niveles educativos que comparten una vida en común, pero que optan por no tener hijos, y donde uno de los miembros es el principal o único proveedor económico.
A menudo, este modelo de relación es adoptado por parejas jóvenes que buscan estabilidad antes de asumir responsabilidades mayores, o por quienes no desean formar una familia con hijos, prefiriendo disfrutar de una vida centrada en el desarrollo de la pareja y sus intereses.
Ventajas de las parejas SINKS
1. Libertad personal y profesional: una de las ventajas que ofrecen estas parejas es la flexibilidad que les permite enfocar sus energías en el desarrollo personal y profesional. Sin la responsabilidad de criar hijos, estas parejas pueden dedicar tiempo a sus carreras, educación continua, viajes o proyectos personales.
2. Estabilidad financiera: al depender de un solo ingreso, estas parejas suelen ser más conscientes de sus decisiones financieras. Sin embargo, la falta de hijos puede liberar recursos que en otras parejas se destinan a la crianza, lo que puede traducirse en una mayor capacidad de ahorro, inversión y disfrute de actividades recreativas.
3. Tiempo de calidad en la relación: la ausencia de responsabilidades parentales puede permitir que estas parejas dediquen más tiempo a cultivar su relación. Tienen la oportunidad de enfocarse en la comunicación, el disfrute mutuo y el crecimiento emocional, sin las distracciones que conlleva la crianza de hijos.
Desafíos de las parejas SINKS
1. Dependencia económica: en este tipo de pareja una persona es la proveedora principal. Esto puede generar tensiones si el miembro que no aporta ingresos se siente en desventaja o si el proveedor se siente abrumado por la carga económica. La comunicación abierta y el respeto mutuo son fundamentales para evitar resentimientos o conflictos por esta disparidad.
2. Perspectivas a largo plazo: aunque las parejas SINKS disfrutan de una vida con mayor flexibilidad, también pueden surgir preocupaciones a largo plazo. Algunos se preguntan cómo serán sus vidas en la vejez sin hijos que los cuiden o cómo manejarán la dependencia económica si las circunstancias laborales cambian. Planificar para el futuro y tener una conversación clara sobre las expectativas y los posibles escenarios es esencial.
Me gustaría conocer tu opinión sobre este nuevo tipo de parejas. Los que me escriban al respecto, recibirán una copia PDF de mi más reciente libro”.
gonzalezbarranquilla@gmail.com
(*) Columna tomada de El Heraldo de Barranquilla.
www.drjmgonzalez.com
No Comments