A un metro bajo el mar la caracola vislumbra la playa y se
aproxima a encallar.
A 10 metros bajo el mar un salmón muere después de vencer la
corriente y depositar su semilla.
A 100 metros bajo el mar los atunes emprenden su partida hacia
las aguas tibias.
A 1000 metros bajo el mar el delfín se prepara para subir y
saltar.
A imprecisos metros la fragilidad humana se ahoga.
Cada quien con su destino y a su hondura…
Un gran volumen de mi deber ir a las profundidades
para poder seguir a flote.
Poeta invitada: Rosa Herrera Bossio.
No Comments