En la variedad está el placer y aplica para todo. Por supuesto, en el sexo también se ajusta. Sin embargo, esa búsqueda del placer puede tener muchos tropiezos y accidentes como les conté en la columna pasada, porque al dejarse llevar por un momento de pasión recurren a cualquier cantidad de “juguetes” que, por supuesto, no son tal y terminan en la sala de urgencias de una clínica.
Por eso, y como lo prometido es deuda, hoy les voy a contar de algunas alternativas que tienen en sus casas, para pasar una noche memorable, divertida y por supuesto #sinrecato con su pareja:
- Cepillo de dientes vibrador: La idea no es introducirlo en ningún orificio si no estimular con su vibración las zonas erógenas. Por ejemplo, masturbando el clítoris. De manera externa, y con la parte del mango, no con el cepillo. En caso de que quiera usarlo de manera interna es obligatorio usar un preservativo que lo cubra para evitar infecciones.
- Plumeros: Me refiero a los de sacudir el polvo, no a los bolígrafos. Ojalá que sea nuevo para poder explorar todo el cuerpo de su pareja e ir turnándose. Si cubren sus ojos con una corbata o con una pañoleta, el momento será más excitante.
- Espátula o cuchara de madera: Si quieres coquetearle al mundo BDSM (Bondage Sadomasoquismo), puede probar con su pareja dándole unas nalgadas con la cuchara o espátula de madera. Ustedes ponen el ritmo. Es un juego Ideal para el nivel principiante.
- Un cinturón o una corbata: Si quieren atarse las manos a la cabecera de la cama pueden usar un cinturón, por supuesto la idea no es apretar hasta cortar la circulación. Si la correa no les parece buena idea, pueden usar una corbata o una pañoleta y el plus es cubrir los ojos. Cuando uno de los sentidos se limita, los demás se potencializan.
- Collar de perlas: Les confieso que este es el que más llamó mi atención. Les aseguró que le van a tomar afecto a los collares. La idea es que, al desnudarse, rodear su cuerpo con él. Es excelente para los juegos previos. También pueden usarlo para masturbar el pene suavemente con el collar y si quiere darle a un plus, antes de la velada, meta el collar en la nevera unos minutos.
- Una moña de pelo: Preferiblemente de tela, pueden usarla como un anillo en la base de pene, permitiendo mantener la erección por más tiempo y ambos disfrutan el estímulo.
- Aceite de coco orgánico: Para aquellas parejas que les gustan los masajes y usar lubricantes. Es una alternativa muy buena, natural y sin químicos.
- Almohada: Hay muchas técnicas para la masturbación femenina. Una de ellas es utilizar una almohada para estimular su clítoris. Incluso también puede servir como un soporte para que su pareja penetre con más profundidad.
- Hielo: ¿Resulta muy versátil y quién no tiene hielo en su nevera? Puedes usarlo como un pincel, demarcando cada lugar del cuerpo donde sabes que tu pareja siente placer y por supuesto descubrir otros lugares. No se recomienda estimular por mucho tiempo en zonas sensibles como el clítoris o el glande porque puede provocar quemaduras. Otra manera de usar el hielo, es tenerlo en tu boca un rato y luego besar a tu pareja. Este cambio de temperatura es muy estimulante y haría que el sexo oral sea a otro nivel.
- Menta: Esas que nos dan después de comer en un restaurante. Simples y económicas. Funcionan como un estimulador sexual. Solo debes tenerla en tu boca y cuando ya sientas el efecto mentolado, practica sexo oral a tu pareja. El contraste de frio y calor, subirá la temperatura.
La idea es disfrutar con tu pareja y salirse un poco de los juegos sexuales a los que están acostumbrados. Un ligero cambio de las rutinas permitirá vivir nuevas experiencias y disfrutar su sexualidad. Explorar y conocer otras zonas erógenas de tu cuerpo hace la diferencia. ¡Atrévete!
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