Sexólogos, psicólogos y expertos en relaciones como la británica Audrey Andrews, concluyeron que las mujeres somos capaces de experimentar doce clases de orgasmos:
* Clitoriano: El estímulo puede ser por roce, sexo oral, un vibrador o ciertas posturas.
* Vaginal: El punto G es el área pequeña sobre la pared vaginal frontal. Los orgasmos se logran masajeando en un movimiento circular de “ven aquí”.
* Mixto: Ocurren cuando se tocan y complacen varias zonas erógenas.
* Múltiples: El orgasmo vaginal y el del clítoris. Forman el combo perfecto para ti y tu pareja.
* Anal: Es fundamental estimulación previa, relajación y lubricar la zona. Un juguete erótico puede ser la mejor herramienta para empezar a practicarlo.
* Sleep-gasm: El cerebro de la mujer es capaz de tener un orgasmo mientras duerme gracias a la relajación.
* Cervical: El clímax se puede conseguir mediante una penetración profunda.
* Punto U: La uretra está rodeada por algunas de las partes ocultas del clítoris. Cuando se estimula, puede provocar eyaculación a “chorros”.
* Punto A: La presión adecuada sobre la zona es similar a la estimulación indirecta del punto G.
* Pezoneros: Acariciar, masajear o lamer los pezones también desencadena la liberación de oxitocina.
* Coregasmos: Un coregasmo comenzará en algún lugar alrededor de tus abdominales y puede ocurrir durante o poco después del entrenamiento, es decir mientras hacemos ejercicios.
