Aunque la sexualidad no se limita a la penetración, porque es una de las tantas formas de proporcionar placer que existen, hoy queremos ilustrar, a través de la ciencia, algunas estrategias para mejorarla y, por supuesto, para disfrutar en pareja.
Por lo tanto, es necesario conocer más de nuestro cuerpo, porque hay zonas más sensibles y receptivas al placer. Por ejemplo, en los genitales masculinos, está el glande, el tronco (base y parte media del pene) y los testículos. En los genitales femeninos, está la entrada de la vagina (los primeros 2 o 3 cms), la vagina superior (donde está el punto G) y el clítoris.
Tanto en hombres como en mujeres, en el perineo hay gran sensibilidad y, por supuesto, no pueden faltar los estímulos visuales, sensoriales, las caricias, los besos, antes de la penetración. Además, es muy importante que ambos estén conectados, excitados y también lubricados.
La Universidad de Indiana, en Estados Unidos, realizó un estudio con unas 3 mil mujeres, entre los 18 y 93 años, en el que se analizaba cómo era su experiencia durante la penetración vaginal.
El principal objetivo de esta investigación era entender mejor las preferencias femeninas para así proporcionar una base científica que les permitiera mejorar la comunicación sobre su placer sexual.
En este estudio, se determinaron tres técnicas de penetración:
- Angling o angulación
- Shallowing o penetración superficial
- Rocking o balanceo
Técnica 1: la angulación fue elegida por el 87.5 % de las mujeres. Esto consiste en ajustar las caderas o la inclinación de la pelvis durante la penetración y cambiar el área que se estimula internamente.
Ventajas: la fricción se enfoca en áreas más sensibles como el punto G.
Plus: si usas almohadas o cojines como soportes, encontrarás un ángulo más placentero.
Técnica 2: la penetración superficial fue elegida por el 84 % de las mujeres. Esta posición se concentra en la estimulación del canal vaginal, en lugar de una penetración profunda.
Ventajas: la entrada de la vagina es una zona que tiene muchas terminaciones nerviosas lo cual genera placer instantáneo.
Plus: los movimientos deben enfocarse en los primeros centímetros de la vagina y se deben experimentar posiciones que limiten la penetración profunda, como de lado o con las piernas juntas.
Técnica 3: el balanceo fue elegido por el 76 % de las mujeres y consiste que en vez de usar el tradicional movimiento de “mete y saca”, el pene se mantiene dentro de la vagina mientras la mujer mueve su cuerpo, de tal manera que la base del pene o el hueso púbico estimulen el clítoris.
Ventajas: el placer es máximo porque se estimula el clítoris directamente sin necesidad de movimientos bruscos.
Plus: en posiciones en donde la mujer está arriba del hombre, ella tiene el control del placer. En vez de moverse de arriba abajo puede hacerlo en círculos o de un lado a otro.
El estudio concluye que muchas mujeres necesitan estimulación extra en el clítoris para alcanzar orgasmos, lo cual ratifica que la penetración vaginal no es suficiente para todas.
El placer es personal y por supuesto no hay una regla general, sin embargo, no se pierde con probar, experimentar y disfrutar de nuevas posiciones o técnicas. Para ello, los expertos sugieren tres pasos durante la penetración para llegar al tan preciado orgasmo:
- Lo primero es llegar al fondo de la vagina, pero sin brusquedad.
- Después, regresar a la mitad de la vagina, lentamente.
- Por último, salir casi por completo y regresar al fondo de la vagina y empezar de nuevo.
Durante la penetración, también puede estimularse el punto G de la mujer. En este caso, la técnica sugiere que ella debe ir arriba y encontrar el ángulo adecuado que estimule la zona detrás del hueso púbico, estimulando el clítoris de forma interna.
Lo mejor es que cada pareja encontrará su ritmo, probará técnicas o descubrirá nuevas zonas erógenas que estimular. Se trata de conocer y deleitarse con nuestro cuerpo y vivir nuevas experiencias.
El placer femenino es diverso y es así como debes experimentar posiciones, estímulos y jugar con tu pareja hasta que encuentren la posición, o las posiciones, más placenteras y disfrutar de una sexualidad #sinrecato.
